Esto apareció en la edición digital del Diario de Cádiz, el jueves 25 de octubre de 2007. Es duro,pero hay que verlo y no mirar para otro lado.
18:38 H.CATALÁN/J.J.MARQUÉS
PUERTO REAL/CÁDIZ. Los ciudadanos italianos Angela Giovanna Jo F. y Simone R. declararon ayer en los Juzgados de Puerto Real en calidad de testigos sobre los supuestos delitos de maltrato animal, denuncia falsa y falsificación de documento público por los que están imputados cuatro de los responsables de la perrera y residencia canina El Refugio, antigua Verde 6.
Al dueño, cuyo nombre se corresponde con las iniciales P.G.M., a la directora, al veterinario titular y a un trabajador de la antigua Verde 6, situada en la carretera hacia Paterna, en Puerto Real, se les imputa la matanza agónica de cientos de animales, perros en su mayoría, pero también gatos, con un potente relajante muscular. Una inyección de Mioflex les procuraba una lenta y barata muerte masiva por asfixia cuando aún estaban conscientes. Tres de esos perros eran los compañeros de Jo y Simone, ambos artistas itinerantes, en el viaje que estaban haciendo por España.Los dejaron en la residencia canina para que los cuidasen mientras recorrían la provincia. En tres horas estaban muertos, según denunciaron ambos.
Antes, activistas de la organización proteccionista nacional también llamada El Refugio ya tenían constancia de la cruenta matanza masiva, que luego investigaron agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
Simone R. fue trasladado esposado en un furgón del instituto armado hasta los Juzgados de Puerto Real, donde entró por una puerta lateral. Desde hace más de dos semanas permanece encarcelado en la prisión de Puerto 2. Está acusado de un supuesto delito de intento de agresión a dos concejalas del Ayuntamiento de Cádiz, una del PP y otra del PSOE, pese a que ninguna de las dos denunciantes le ha reconocido como su supuesto agresor. Tampoco nadie ha podido demostrar hasta el momento que Simone R. intentase atentar contra nadie tras una concentración de protesta por el caso de la perrera en la que se profirieron graves insultos contra las ediles y la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez (PP), en la Iglesia de Santo Domingo, durante la Coronación de la Patrona.
Quién si presentaba evidentes heridas contusas y sangrantes en la cara y la cabeza era el italiano, durante y tras su detención, tal y como se observa en las fotos que hizo este periódico. Sólo un guardaespaldas y la Policía sostienen que Simone R. intentó agredir a la alcaldesa. El juez decretó su ingreso en prisión preventiva por falta de arraigo, es decir, por no disponer de domicilio fijo en Cádiz. La compañera del artesano italiano preso ha sido imputada de haber participado en esa concentración, tras ser identificada por la propia Teófila Martínez en una rueda de reconocimiento en Comisaría. Los vídeos de la concentración llevan dos semanas colgados en internet.
A la puerta de los Juzgados de Puerto Real acudieron casi una treintena de personas pertenecientes a distintas asociaciones protectoras de animales como Prodean, Kimba y No me Abandones que portaron pancartas solicitando que se esclarezcan las prácticas llevadas a cabo por la citada perrera de ámbito provincial. A las diez de la mañana, Jo F. hacía acto de presencia a las puertas de los juzgados. Treinta minutos después llegaba Simone R. Casi dos horas más tarde, una vez concluyó su declaración ante la jueza, la ciudadana italiana hizo público lo declarado en dicha vista, respecto a los sacrificios agónicos e inesperados de sus perros. "Estoy feliz por poder contar mi testimonio, aunque con esta declaración se abre una herida y un dolor. Ahora la jueza deberá hablar con unos imputados que han mentido y falsificado papeles, por lo que entiendo que lo justo es que se cierre la perrera", dijo Jo F.
La ciudadana italiana está citada el próximo día 31 en el Juzgado Número 2 de la capital gaditana para declarar por los sucesos de la concentración. "Estoy muy tranquila por este requerimiento, porque tengo la conciencia limpia de que no hice nada". Por último, también aprovechó la oportunidad para pedir la colaboración de los testigos de dichos acontecimientos, para que aporten si tienen en su poder el testimonio o algún documento gráfico de dicha jornada.
Me parece increíble que pasen estas cosas,que haya alguien que dedicó al menos cinco años a estudiar cómo "tratar" a los animales,y acabe dedicándose a hacerlos morir cruelmente.Que puedan existir personajes de esta calaña...dueño,veterinario,trabajador,da igual... te gusten o no los perros,los gatos,los animales en general,el respeto por la vida de un ser, debería ser intocable. Abusar de nuestro "poder" sobre ellos, simplemente me da asco.